“Me he estancado y no progreso”.
“No encuentro la motivación para hacer deporte”.
“Me duele la espalda y temo que el dolor vaya a peor, no sé qué hacer”.
“No logro quitarme de encima los kilos que me sobran”.
Es posible que, en alguna ocasión, con respecto a la práctica de alguna actividad física, hayas expresado alguna de las anteriores frases. Si ese es tu caso, no te alarmes, no eres el único, mucha gente está en una situación similar a la tuya.
Es posible que como solución a tu problema hayas recurrido en busca de ayuda a amigos deportistas de confianza o a la gran cantidad de información que encontramos en redes sociales. Si has hecho esto, felicitarte por dar el primer paso, que a veces suele ser el más complicado, el de pedir ayuda.
Ahora bien, ¿cuál puede ser una de las mejores soluciones para sentirte motivado, progresar y evitar lesionarte a la hora de hacer deporte?
¿Cómo puedo sacarle la máxima rentabilidad o eficacia a cada sesión y obtener los mejores resultados?
Una de las mejores soluciones es la de contratar un entrenador personal bien cualificado y competente. ¿Cómo sabemos que un entrenador personal está bien cualificado y va a poder darnos un servicio de calidad?
Un buen entrenador persona deber ser capaz de:
- Realizar una correcta valoración de la condición física de su cliente y medir su evolución en el tiempo.
- Adaptar el entrenamiento en función de la valoración anteriormente realizada, basándose en los objetivos del cliente, posibles descompensaciones musculo – esqueléticas y ajustarse a su disponibilidad horaria, entre otros.
- Planificar el entrenamiento en el tiempo para el desarrollo óptimo de las capacidades físicas que se pretenden mejorar, como la fuerza, la incremento de la masa muscular o la resistencia.
- No crear excesiva dependencia del cliente hacia él. Uno de los objetivos es adiestrar y enseñar al cliente a que implante y desarrolle en su vida buenos hábitos de actividad física, descanso y nutrición si fuera el caso.
Si tenemos en cuenta estos factores en el servicio que nos proporcione podremos determinar si con ese entrenador progresaremos o más bien si estamos perdiendo nuestro dinero.
¿Qué ventajas vamos a obtener al contratar un entrenador personal cualificado?
Podemos enumerar 3 ventajas:
- Cada sesión de entrenamiento que realices estará hecha a tu medida. El entrenador, al tener en cuenta tu objetivo, tu estado físico y tu disponibilidad, podrá elaborar sesiones de entrenamiento personalizadas única y exclusivamente para tí, con el objetivo de que cada sesión te acerque más a tu meta y te aleje de las lesiones.
- Al estar pendiente de ti un profesional, serás capaz de incrementar tu motivación y rendir al máximo en cada serie. Por otro lado, al contratar un entrenador personal, tu nivel de compromiso, si a veces flaquea la fuerza de voluntad, también aumentará. Esto te permitirá mantener una continuidad a lo largo del tiempo, lo que, al fin y al cabo, es el secreto para obtener mejoras.
- Por último, este profesional te ayudará a obtener poco a poco los conocimientos para saber entrenar por tu cuenta de forma eficaz y sostenible en el tiempo, ya que su labor también consiste en instruirte y enseñarle a entrenar correctamente.
No lo dudes, un buen entrenador puede ahorrarte mucho tiempo, pues será capaz de conducirte por el camino más adecuado para ti en la búsqueda de tus metas.